Un breve extracto de un meta-análisis sobre intervenciones psicoterapéuticos basadas en el perdón

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A continuación les presento un extracto de un artículo publicado recientemente sobre la eficacia de modelos teóricamente basados de intervención en perdón. Los autores del estudio, Wade, Hoyt, Kidwell & Worthington (2013) realizaron un meta-análisis en donde toman los datos de 54 estudios publicados y no publicados sobre intervenciones explícitamente aplicadas para promover el perdón. El modelo Enright y el modelo Worthington de intervenciones en perdón pueden ser aplicadas de manera individual y grupal. El extracto inicia a continuación:

El estudio psicológico del perdón ha aumentado dramáticamente en las últimas dos décadas (Fehr, Gelfand, & Nag, 2010; Worthington, 2005), especialmente en la exploración de intervenciones diseñadas de manera explícita para promover el perdón. La evidencia inicial apoya la eficacia de estas intervenciones en perdón, mostrando que pueden ayudar a los participantes a incrementar su grado de perdón por una ofensa o daño, aumentando la esperanza y bienestar psicológico, y disminuyendo depresión, ansiedad, y enojo (Baskin & Enright, 2004; Wade, Worthington, & Meyer, 2005).

Definición del Perdón

¿Qué es «perdonar»? De acuerdo al consenso que emerge entre los investigadores en intervenciones, el perdonar puede incluir tanto (a) la reducción de pensamientos, sentimientos, y motivos de venganza y enojo que pueden estar acompañados de (b) un aumento en alguna forma de pensamientos, sentimientos, y motivos positivos hacia la persona que ofende (Wade & Worthington, 2003). Así, el perdonar se entiende como una experiencia principalmente interpersonal que no incluye reconciliación con la persona que ofende aun cuando la reconciliación pudiera acompañarla. La mayoría de los investigadores están de acuerdo que el perdonar no es olvidar, condonar, o excusar la mala conducta, y tampoco es simplemente lo opuesto o la ausencia de amargura y vengatividad (i.e., falta de perdón, Wade & Worthington, 2003; véase un acuerdo esencial entre 20 equipos de investigadores en Worthington, 2005).

Dada esta definición, el buscar promover el perdón en psicoterapia es más que simplemente reducir enojo, amargura, y ruminación vengativa. Con muchos clientes, la simple reducción o eliminación de pensamientos y sentimientos negativos pudiera ser considerado un éxito psicoterapéutico. Sin embargo, algunos psicoterapeutas se han preguntado, ¿Qué más se puede hacer por mis clientes que han experimentado un daño significante? (p. ej., DiBlasio & Benda, 1991). En respuesta a esta pregunta, investigadores y clínicos han propuesto que ayudar a los clientes a perdonar pudiera ser un enfoque útil en psicoterapia (Enright, 2001; Worthington, 2001). Esto está en línea con la perspectiva de la psicoterapia positiva la cual busca atender hacia y desarrollar fortalezas en lugar de solo minimizar problemas (Gelso & Woodhouse, 2003; Seligman, Rashid, & Parks, 2006). Así, la promoción del perdón como una técnica psicoterapéutica es más que simplemente reducir pensamientos y sentimientos negativos pero también incluye ayudar a los clientes a avanzar hacia un funcionamiento más positivo, incluso óptimo.

Intervenciones Explícitas en Perdón

Como resultado, se han desarrollado varios modelos teóricos de perdón para promover el perdonar (p. ej., Enright, 2001; Luskin, 2007; Worthington, 2001). Grupos de investigadores encabezados por Enright y Worthington han liderado el camino en la investigación de eficacia de estas intervenciones. El modelo de tratamiento de Enright contiene 20 pasos (Enright & Fitzgibbons, 2000), los cuales están resumidos en cuatro fases: Descubrimiento (de sentimientos negativos sobre la ofensa), Decisión (para buscar el perdón por una instancia específica), Trabajo (hacia entender a la persona ofensora), y Hallazgo (de resultados positivos no anticipados y empatía hacia la persona ofensora). Cada una de estas fases incluyen varios pasos más pequeños dentro de ellas. Por ejemplo, dentro de la fase de Trabajo, los clientes trabajan hacia entender al ofensor, desarrollar compasión, aceptar/absorber el dolor, y considerar dar el regalo del perdón al ofensor (Enright, 2001). La eficacia del modelo Enright ha sido demostrado con varios grupos tan diversos como adultos sobrevivientes de incesto (Freedman & Enright, 1996), padres que han adoptado niños con necesidades especiales (Baskin, Rhody, Schoolmeesters, & Ellingson, 2011), y pacientes internados que están luchando con adicción al alcohol y drogas (Lin, Mack, Enright, Krahn, & Baskin, 2004).

El otro grupo primario de investigación ha conducido investigación alrededor del modelo de Perdón REACH de Worthington (2001).  Cada letra en el acrónimo REACH representa un componente principal en el proceso del perdón. En el primer paso de este modelo, los participantes recuerdan (R) el daño que experimentaron y las emociones asociadas con este. Después, los participantes trabajan para empatizar (E) con su ofensor, tomar la perspectiva de otro, y considerar factores que pudieran haber contribuido a las acciones del ofensor. Esto se hace sin condonar las acciones del otro o invalidando los sentimientos muchas veces fuertes que la persona ofendida tiene como respuesta. Tercero, los participantes exploran la idea de que el perdonar puede ser un regalo altruista (A) hacia el ofensor. Los participantes aprenden que el perdón se puede dar de manera libre o retenido legítimamente y recuerdan las veces en que otros los han perdonado. Cuarto, los participantes hacen un compromiso (C) para perdonar. Esto incluye comprometerse al perdón que uno ya ha alcanzado así como comprometerse a trabajar hacia más perdón, sabiendo que este es un proceso que muchas veces requiere tiempo para madurar. Por último, los participantes buscan sujetarse (H por su sigla en inglés) de o mantener su perdón a través de momentos de incertidumbre o ante el retorno del enojo y amargura (p. ej., si son lastimados de nuevo de manera similar).

Meta-análisis previos han indicado que intervenciones de esta naturaleza pueden promover de manera efectiva el perdón (Baskin & Enright, 2004; Wade et al., 2005). En uno de los primeros meta-análisis sobre la eficacia de intervenciones en perdón, Baskin y Enright encontraron que en nueve estudios de terapia individual y grupal (N = 330 participantes), intervenciones explícitas en perdón aumentaron el perdón, esperanza, y autoestima, y redujeron ansiedad y depresión.

Conclusiones de los autores del meta-análisis

Parece ser que el usar intervenciones en perdón teóricamente basadas es una buena elección para ayudar a los clientes a lidiar con ofensas pasadas y ayudarles a alcanzar resolución en la forma de perdonar. Las diferencias entre enfoques de tratamiento desaparecieron cuando se hizo control para otros moderadores significantes; la ventaja para intervenciones individuales fue más claramente demostrada para el modelo Enright de intervenciones, ya que no han habido estudios sobre intervenciones individuales utilizando el modelo Worthington.

Tomado del artículo: Wade, N. G., Hoyt, W. T., Kidwell, J. E. M., & Worthington, E. L., Jr. (2013, December 23). Efficacy of Psychotherapeutic Interventions to Promote Forgiveness: A Meta-Analysis. Journal of Consulting and Clinical Psychology. Advance online publication. doi: 10.1037/a0035268